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ideas en sí y los principios y, además, que proceden de los elementos y que  así como algunos otros dijo que el alma es aire, por considerar que éste es
ciertas cosas se disciernen con el intelecto, otras con la ciencia, otras con la no sólo lo más ligero, sino también principio, razón por la cual el alma conoce
opinión y otras con la sensación. Estos números, por lo demás, son las ideas y mueve: conoce en cuanto que es lo primero y de él se derivan las demás
de las cosas. Y puesto que el alma les parecía ser a la vez principio de cosas; es principio de movimiento en cuanto 25 que es lo más ligero. Heráclito
movimiento y principio de conocimiento, algunos llevaron a cabo una síntesis afirma también que el principio es alma en la medida en que es la exhalación
de ambos aspectos, afirmando que el alma es 30 número que se mueve a sí a partir de la cual se constituye todo lo demás; es además lo más incorpóreo
mismo. Discrepan, sin embargo, sobre cuáles y cuántos son los principios, y se encuentra en perpetuo fluir; lo que está en movimiento, en fin, es
especialmente aquellos autores que ponen principios cor-405a póreos y conocido por lo que está en movimiento. Tanto él como la mayoría han
aquellos otros que los ponen incorpóreos; de unos y otros discrepan, a su vez, opinado que los entes se hallan en movimiento. Cercano a los anteriores es
los que proponen una mezcla estableciendo que los principios proceden de también, a lo que pa-30 rece, el punto de vista de Alcmeón acerca del alma:
ambos tipos de realidad. Discrepan además en cuanto al número de los efectivamente, dice de ella que es inmortal en virtud de su semejanza con los
mismos: los hay, en efecto, que ponen uno sólo mientras otros ponen varios. seres inmortales, semejanza que le adviene por estar siempre en movimiento
De acuerdo con todas estas teorías dan cuenta del alma. Y no sin razón han pues-405b to que todos los seres divinos  la luna, el sol, los astros y el
supuesto que aquello que mueve a la Natu- 5 raleza ha de contar entre los firmamento entero se encuentran también siempre en movimiento
primeros principios. De ahí que algunos hayan opinado que era fuego: éste continuo. Entre los de mentalidad más tosca, en fin, algunos como Hipón
es, en efecto, el más ligero y más incorpóreo de los elementos, amén de que se llegaron a afirmar que el alma es agua; su convicción deriva, al parecer, del
mueve y mueve primordial-mente todas las demás cosas. hecho de que el semen de todos los animales es húmedo; este autor refuta, en
efecto, a los que dicen que el alma es sangre, replicando que el 5 semen no es
Demócrito, por su parte, se ha pronunciado con mayor agudeza al explicar el sangre y sí es, sin embargo, el alma primera. Otros, como Critias, han
afirmado, por el contrario, que el alma es sangre, partiendo de que lo más
propio del alma es el sentir y esto le corresponde al alma en virtud de la
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5 Véase DIELS, H.-KRANZ, F., Die Fragmente der Vorsokrati-ker, Emp. B 109 (I, 351, 20).
naturaleza de la sangre. Todos los elementos han encontrado, por tanto,
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6 Véase el Timeo, 34 c sigs. algún partidario, si exceptuamos la tierra; nadie se ha pronunciado por ésta a
no ser quien haya afirmado que el 10 alma proviene de todos los elementos o
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No es segura  por carencia de datos suficientes la identificación de este tratado al
se identifica con todos ellos.
que también se alude en la Física IV 2, 209b14-15. En cualquier caso, es obvio que tanto su
procedencia como su contenido son platónicos.
En resumidas cuentas, todos definen al alma por tres características:
P s i K o l i b r o P s i K o l i b r o
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movimiento, sensación e incorporeidad. Cada una de estas características se
remonta, a su vez, hasta los principios. De ahí que los que definen al alma por CAPÍTULO TERCERO
el conocimiento hagan de ella un elemento o algo derivado de los elementos
coincidiendo entre sí en sus afirmaciones a excepción de uno de ellos31: afir- 15 Donde se critica la teoría según la cual el alma se
mueve por sí atendiéndose de modo muy especial
man, en efecto, que lo semejante es conocido por lo semejante y, puesto que el
a la versión platónica de la misma
alma conoce todas las cosas, la hacen compuesta de todos los principios. Por
tanto, todos aquellos que afirman que hay una única causa y un único
Analicemos, en primer lugar, lo relativo al movimiento ya que, a buen
elemento, establecen también que el alma es ese único elemento, por ejemplo,
seguro, no sólo es falso que la en-406a tidad del alma sea tal cual afirman
el fuego o el aire; por el contrario, aquellos que afirman que los elementos son
quienes dicen que es aquello que se mueve a sí mismo  o bien aquello que
múltiples, hacen del alma también algo múltiple. Anaxágoras es el único en
tiene la capacidad de moverse a sí mismo , sino que además es imposible
afirmar que el in- 20 telecto es impasible y que nada tiene en común con
que el movimiento se dé en el alma. Por lo pronto ya ha quedado explicado
ninguna otra cosa: cómo y por qué causa conoce siendo de naturaleza tal, ni
con anterioridad32 que no es necesario que lo que mueve se encuentre a su
lo ha dicho ni se deduce con claridad de sus afirmaciones. Por otra parte,
vez en movimiento. Pero es que además y puesto que todo lo que se mueve
aquellos que ponen las contrariedades entre los principios construyen el alma
puede moverse de dos maneras  puede, en efecto, moverse ya 5 por otro ya
a partir de los contrarios, mientras que los que establecen como principio
por sí: decimos que es movido por otro todo aquello que se mueve por [ Pobierz caÅ‚ość w formacie PDF ]

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